Dilemas ciudadanos
Aristos social club. La idea había surgido entre las risas de algunos y la indiferencia de la gran mayoría. Nadie querría participar en un club donde te exigían pagar por lo que era gratis para todos. Empezaron con servicios sociales básicos: educación, sanidad, desempleo, jubilación. Pero muy pronto tuvieron excedente de dinero, porque el estado ya cubría todo esto. Así que con una "cómoda cuota mensual” (o al menos así lo vendía el anuncio) fue creando toda una red de centros deportivos, y de actividades culturales. Destinadas, por supuesto, solo a los socios.